'... There's no where to runaway
Damn you I hope you pay
And finish the day to day
Games we play
... Ima' stay at home
And talk on the telephone
There's nothing in this world I want from you,
Don't fool yourself, I won't cry....
You're too scared to live
Too quick to die'
Damn you I hope you pay
And finish the day to day
Games we play
... Ima' stay at home
And talk on the telephone
There's nothing in this world I want from you,
Don't fool yourself, I won't cry....
You're too scared to live
Too quick to die'
Paradójica, curiosa, la tremenda subjetividad del arte. La chispa adecuada puede prender aquéllo que desees. Todo está en tu mente.
Qué mejor título. Lo que quería, y lo que no sabes hacer. Tú destruyes, no construyes.
Paradojas.
Tanto miedo de vivir que sigues en tu jaula de oro, llorando por tu cautiverio, con la puerta abierta.
Bueno, todos sabemos algo de inglés. No se puede viajar por Europa sin saber algo de inglés.
Y ya saboreamos la agradable sensación de tener otras cosas en la cabeza, de centrarse en algo y no tener ese pensamiento por detrás, perenne, constante, esas ganas de escuchar, de oír al menos... No, mejor así. No, no quiero oír nada.
Quiero que el Dragón escape lo más lejos posible.
No puedo evitar ser lo que soy, sentir las pulsiones, caer de vez en cuando y subir alguna otra vez. No puedo evitar verme en los ojos secos, en las cicatrices, en los tatuajes y las pistolas. Y quisiera haber estado en cada solitaria habitación de hotel de París, sosteniendo una ya decrépita y huesuda mano por cuyo roce a través de un guante se hubiese besado el suelo en otros tiempos.
Y quisiera haber hecho balance con Sartre, y compartido su lucidez para dar un sentido mayor que una estúpida enfermedad pseudoreal y dolor a una muerte.
Y quisiera haber estudiado en la Holden para enriquecer mi modo de expresarme, limitado, basto, repetitivo hasta la náusea.
Y el sexo, no olvidemos el sexo, el sexo es básico... Quiero ser Madonna o algo mejor...
Pero ante todo, quiero estar aquí, con el bichito, descubriendo amaneceres en la ciudad gris, en la playa, oliendo el mar, escuchando música, visitando valles perdidos entre montañas, viendo la felicidad en la cara de mi gente y el brillo de sus ojos, escuchando risas, olvidándome de mi estómago, hablando de Cohen y de los Cohen, apreciando la belleza en todas sus manifestaciones, volviendo a pintar, escuchando a quien creo merece ser escuchado, cantando, bailando, abrazando, cuidando de lo mío, aprendiendo, y buscando la paz.
Y si he de morir en un hotel de París, seguiré estudiando francés. O alemán.
Supongo que por eso, después de ocho años, sigo prefiriendo el 'Lili Marleen' cantado por la Dietrich en alemán, no en inglés. Y eso que el accento en inglés tiene su aquél. Pero lo necesito en alemán, porque hasta que no le dices a alguien "te quiero" en tu lengua materna, no se lo estás diciendo en serio.
Qué mejor título. Lo que quería, y lo que no sabes hacer. Tú destruyes, no construyes.
Paradojas.Tanto miedo de vivir que sigues en tu jaula de oro, llorando por tu cautiverio, con la puerta abierta.
Bueno, todos sabemos algo de inglés. No se puede viajar por Europa sin saber algo de inglés.
Y ya saboreamos la agradable sensación de tener otras cosas en la cabeza, de centrarse en algo y no tener ese pensamiento por detrás, perenne, constante, esas ganas de escuchar, de oír al menos... No, mejor así. No, no quiero oír nada.
Quiero que el Dragón escape lo más lejos posible.
No puedo evitar ser lo que soy, sentir las pulsiones, caer de vez en cuando y subir alguna otra vez. No puedo evitar verme en los ojos secos, en las cicatrices, en los tatuajes y las pistolas. Y quisiera haber estado en cada solitaria habitación de hotel de París, sosteniendo una ya decrépita y huesuda mano por cuyo roce a través de un guante se hubiese besado el suelo en otros tiempos.
Y quisiera haber hecho balance con Sartre, y compartido su lucidez para dar un sentido mayor que una estúpida enfermedad pseudoreal y dolor a una muerte.
Y quisiera haber estudiado en la Holden para enriquecer mi modo de expresarme, limitado, basto, repetitivo hasta la náusea.
Y el sexo, no olvidemos el sexo, el sexo es básico... Quiero ser Madonna o algo mejor...
Pero ante todo, quiero estar aquí, con el bichito, descubriendo amaneceres en la ciudad gris, en la playa, oliendo el mar, escuchando música, visitando valles perdidos entre montañas, viendo la felicidad en la cara de mi gente y el brillo de sus ojos, escuchando risas, olvidándome de mi estómago, hablando de Cohen y de los Cohen, apreciando la belleza en todas sus manifestaciones, volviendo a pintar, escuchando a quien creo merece ser escuchado, cantando, bailando, abrazando, cuidando de lo mío, aprendiendo, y buscando la paz.Y si he de morir en un hotel de París, seguiré estudiando francés. O alemán.
Supongo que por eso, después de ocho años, sigo prefiriendo el 'Lili Marleen' cantado por la Dietrich en alemán, no en inglés. Y eso que el accento en inglés tiene su aquél. Pero lo necesito en alemán, porque hasta que no le dices a alguien "te quiero" en tu lengua materna, no se lo estás diciendo en serio.
* Broken Homes - Tricky ft. PJ Harvey
No comments:
Post a Comment